jueves, 5 de septiembre de 2013

Que no te vea

- Creo... creo que no estoy preparado todavía.- decía tímidamente con su cara de inocencia.
- Claro que sí- le animaba quien parecía su jefe.-, te has entrenado para esto.
- Ya pero los entrenamientos eran muy distintos a lo que ahora veo.- su voz reflejaba miedo, miedo a fracasar en una misión que, según creía, no era para él.
- Ven, te enseñaré dónde estarás y quién será tu objetivo. Es importante que nunca le pierdas la pista, nunca le dejes solo y... que no te vea.
Pasearon por las calles, por los edificios, por los pasillos que recorría diariamente el individuo que sería el objetivo del recién salido de la academia. Observaron sus hábitos, sus pasatiempos, sus costumbres, su trabajo, su vida cotidiana, en definitiva, todo lo que hacía en su día a día.
El jefe miró al novato con expresión empática.
- Podrás hacerlo, confío en ti. Eres el mejor para vigilar a este hombre. Eres quien más puede ayudarle.  Esta misión es para ti, quiero que seas tú.
- Si esa es tu voluntad, que así sea.
Y sin decir más, el recién estrenado ángel de la guarda batió sus alas y acompañó, guió y protegió al hombre todos los días, aunque éste no le veía.


¿Te ha gustado? ¡Suscríbete!

9 comentarios:

  1. Precioso! Magnífico!
    Aunque no te haya estado comentando... no me he perdido ni una sola entrada tuya.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias! Qué agradable es saber que los lectores se mantienen ;)

      Eliminar
  2. Genial. Sigue escribiendo. El anterior también me encantó.

    ResponderEliminar
  3. Me ha encantado, Gonzalo. La angelical sorpresa final está "divina". Un cordial saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias! Me gusta escribir finales sorprendentes, aunque no siempre es fácil y me queda mucho por mejorar...

      Eliminar
  4. Pensaba que en vez de un ángel de la guarda, saldría un profesor al final. Sigue escribiendo querido Arbex, sigue siendo humano.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pensé en poner un profesor... pero no quería que nadie se diese por aludido ;P Seguiré escribiendo, aunque no aseguro que vaya a seguir siendo humano... lo siento. ¡Un saludo desde el otro lado de la pantalla!

      Eliminar